TRES PREGUNTAS A RAQUEL ALCARAZ y MIRIAM SAIZ. Biólogas de la Unidad de Investigación del HUBU.

Forman parte de la Unidad de Investigación como personal contratado por la Fundación Burgos por la Investigación de la Salud. ¿En qué consiste su trabajo?

Raquel Alcaraz: nuestro trabajo es la realización y redacción de proyectos de investigación, en mi caso en oncología médica. Gestiono las muestras de los ensayos, apoyo en el procesamiento, etc. Podría decirse que mi tarea es poner en práctica la idea de los proyectos dando soporte con la metodología, la tramitación… Es coordinar el proyecto.
Miriam Saiz: llevo varios ensayos de Hematología, lo que se llama “study
coordinator”; cargo los datos, proceso las muestras, realizo las visitas de monitorización cuando vienen a auditarnos y, a mayores, estoy conformando un grupo de farmacogenética. Igual que Raquel, me encargo de coordinar proyectos, en mi caso, de Hematología y también de Neumología.
R.A.: otra labor que también hacemos es docente; somos tutoras de práctica
docente y Miriam es profesora asociada de Fisiología en el grado de Ingeniería de la Salud de la UBU.

¿Cuáles han sido los logros más relevantes en el último año y cuáles se plantean a medio plazo?

M.S.: a lo largo del curso 2020/21 en la unidad hemos conseguido diez
convocatorias regionales y locales. Del total conseguido en el hospital participamos aproximadamente en la mitad de ellas. Algunas de esas convocatorias son de la GRS (en ámbito covid y no covid), de la FUNCALHH (Fundación castellanoleonesa de Hematología y Hemoterapia) y de la FBIS (Fundación Burgos para la Investigación
de la Salud). Además, hemos conseguido mi contrato a través de la convocatoria Sara Borrell, del Instituto de Salud Carlos III.
R.A.: hemos abierto una línea de investigación en el seguimiento de pacientes con linfoma de células B a través de biomarcadores. Con ello esperamos detectar las recidivas de forma precoz y cambiar el tratamiento cuanto antes para estabilizar la enfermedad y evitar así las metástasis. Esto se refiere al ámbito hematológico; en el oncológico sería lo mismo, pero aplicado a tumores sólidos. Los últimos en los que hemos trabajado son tumores neuroendocrinos.
M.S.: otro proyecto es la implantación de la farmacogenética a través de tres estudios en curso en Hematología, Oncología y Endocrinología. A medio/largo plazo mi objetivo es que esos marcadores se puedan usar en el ámbito asistencial.

¿Qué mensaje o reflexión les gustaría compartir con todos los profesionales del CAUBU?

M.S.: en estos tiempos más que nunca tenemos claro la importancia de la
investigación. El mensaje que me gustaría trasladar es que es imprescindible colaborar entre los distintos profesionales para crecer como unidad de investigación y como hospital. En Medicina no hay avances sin investigación y, aunque el camino es duro y está lleno de obstáculos, merece la pena. Este último año se han conseguido en la unidad varias becas regionales que nos permiten avanzar, así como el contrato Sara Borrell para financiar mi contrato, y el objetivo es seguir haciendo camino.
R.A.: me gustaría que en ese camino fuéramos todos juntos y que los profesionales del HUBU encuentren en la Unidad de Investigación la ayuda que necesitan para tratar de mejorar a través de la investigación las cuestiones que quedan abiertas en el manejo clínico diario.